En Bilbao no hay parroquianos, hay txikiteros. Este es el nombre que se da a quienes consumen txikitos, un vasito de vino con el que se alterna en los bares. Be txikitero, my friend.
Si, está leyendo bien, te traemos la ruta perfecta para conocer Bilbao en un día, consejos, recomendaciones y los lugares más interesantes que ver en la ciudad. La verdad es que no nos gustaría dejarnos por el camino ningún punto clave, pero debemos reconocer que, a pesar de no ser una ciudad muy grande, es muy complicado ver todo en un día (intentaremos hacer una segunda versión para completar la visita en un fin de semana). Pero sintetizando un poco hemos tratado de hacer la mejor ruta posible para conocer la ciudad a fondo.
Antes de empezar a recorrer las calles, es importante coger fuerzas, y como todo el mundo sabe, el desayuno es la comida más importante del día. Y nosotros no somos nadie para contradecir la opinión de los profesionales, te lo ponemos fácil con el desayuno buffet de LATROUPE La Granja para empezar el día con el mejor pie.
Bilbao es una ciudad increíble, y la mejor forma de descubrir todos sus recovecos es a pie, aunque para los más perezosos siempre existe la opción coger el autobús, el tranvía o incluso el metro. Pero para comenzar nuestro viaje, nos dirigiremos a la Estación de la Concordia, situada a escasos metros de nuestro hostel. Comúnmente conocida como la Estación de Santander, esta estación de ferrocarril que unía Santander con Bilbao rompe con la estética industrial de la ciudad con sus formas llamativas y colores intensos.
Desde ahí y cruzando el Puente del Arenal, llegamos a nuestra parada número dos en la que podemos visitar el famoso Teatro Arriaga. Sin duda os recomendamos que echéis un vistazo a su programación de espectáculos, siempre tienen actuaciones de lo más entretenidas.
Alejándonos un poco de esta zona y dando un paseo por la orilla de la Ría de Bilbao llegaremos al Mercado de la Ribera, un lugar que no solo impresiona por su belleza arquitectónica, sino que da sentido a la deliciosa gastronomía vasca y es que podemos encontrar los productos de la mejor calidad proveniente de los mejores huertos y mares locales.
Como seguro que después de ver tanta comida nos ha entrado un poco de hambre, ponemos rumbo al cuarto destino, no sin antes visitar la hermosa Catedral de Bilbao y pasar por las pintorescas calles del Casco Antiguo, para llegar por fin a la Plaza Nueva. Entre los arcos de esta preciosa plaza encontramos el mejor ambiente y haremos una pequeña parada en cualquiera de sus bares para tomarnos el aperitivo, con un buen pintxo y su correspondiente bebida.
Descansamos, pero no nos apalancamos porque seguimos con nuestra excursión. Tras haber abierto un poco el apetito, esta vez nos dirigimos a nuestro bar de pintxos favorito para comer, El Globo. Para llegar, cruzaremos el Puente del Ayuntamiento (de camino a este, pasamos por Areatzako Pasealekua donde todos los domingos por la mañana instalan el precioso Mercado de las Flores Que sin duda merece la pena ver) y atravesaremos la Gran Vía de la ciudad. Una extensa avenida donde podemos encontrar las tiendas más populares en las que seguro haremos alguna que otra compra más o menos necesaria. Una vez en el restaurante, os haremos una recomendación que más bien podríamos llamar regalo: el pintxo de txangurro… ESPECTACULAR.
Ahora sí, os dejamos hacer una breve pausa, pero después de comer llega la hora de la parte más cultural de la visita, y empezamos con el Azkuna Zentroa Alhóndiga. Este edificio que en otra vida fue un almacén de vino, hoy es un centro cultural lleno de arte, innovación y cultura, que seguro llamará tu atención.
Como no puede ser de otra manera, los museos son un obligatorio en esta sección. Primero, el Museo de Bellas Artes de Bilbao en el que podemos disfrutar de obras de una amplia cronología, que abarca desde el sigo XIII hasta nuestros días. Por otro lado, antes de llegar a la estrella de la corona, hay que hacer una escala en el adorable Puppy para hacerse la conveniente fotito de recuerdo.
Y ahora sí que sí, el majestuoso y archiconocido mundialmente, nuestro querido Museo Guggenheim en el que disfrutar del mejor arte contemporáneo y las obras más rompedoras y extravagantes de artistas de renombre.
De camino a cenar y regreso al hostel podremos admirar los puentes de La Salve y Zubizuri. A escasos pasos del destino final, debemos parar para cenar y es que el Bar Iruña es la opción perfecta después de un largo día de turismo. Aquí no te puedes ir sin probar su famoso pintxo moruno o el bacalao a la koskera.
Por último, pero no por eso menos importante, acabamos donde empezamos, en el mejor lugar de la ciudad, Latroupe. Y es que para combatir el cansancio y acabar el día como se merece, hay que aprovechar para tomar una copita o dos (lo que te pida el cuerpo) en nuestro bar y por su puesto participar en cualquiera de los eventos diarios que tenemos preparados, entre los más destacados están nuestro karaoke o el más divertido bingo musical.
Bueno pues hasta aquí llega nuestra excursión del día, sabemos que estaréis agotados, pero merecerá la pena y además descansar en nuestras son la medicina perfecta para recargar pilas y volver a la carga al día siguiente.
